Una extraña figura se podía divisar cerca de la entrada de Konoha, una figura que parecía tener algo cargando. Suigetsu se encontraba muy cansado, caminando lentamente hacia Konoha, ya que este decidió tomar el puesto de Kage, al asesinar mortalmente a este.
En la entrada, como de costumbre solía tener todas las aldeas, se encontraban dos ninjas medianamente experimentados. Estos al ver a Suigetsu sin ningún rasguño, y el cuerpo de su actual Kage en sus brazos, muerto, estos sacaron sus Kunais, y se pusieron enfrente de Suigetsu.
El ninja de Otokagure paro su caminar, y sin ninguna reacción alguna, y al ver como los ninjas temblaban de miedo, este dijo algunas palabras.
~Su querido hokage ya esta muerto.. Lo mate yo.. Cubriré su puesto..~
Hozuki siguió su camino, pero aquellos ninjas ni se movieron.
~No quiero esforzarme, este cuerpo se pudrira en pocos momentos.. fuera..~
Con su otra mano saco grandes cascabeles, y el sonido afecto a aquellos dos ninjas. Se quedaron paralizados, ojos blancos, y pálidos. Suigetsu no se preocupo, duraría poco.
Siguió su camino, dirijiendose rapidamente a el Despacho, para anunciar a aquella villa al nuevo Kage. La poca gente que lo observaba se quedaban atónitos al ver al cuerpo de Ulquiorra en sus manos, pero muchos no les importaba.